La isla de Bornholm pertenece a Dinamarca, aunque está algo alejada del resto del país, frente a la costa del sur de Suecia. Se trata de una isla de dimensiones reducidas, que ofrece al visitante principalmente naturaleza y playas.
El puente del Øresund ha simplificado las comunicaciones con ella hasta el punto de que hoy es posible llegar hasta allí en apenas tres horas, cuando no hace demasiado tiempo se tardaba toda una noche en barco desde Copenhague.
Para llegar hasta allí, la mejor alternativa son los trenes daneses, que ofrecen conexión directa con la isla a través de Suecia. El tren circula hasta la localidad de Ystad y, desde allí, el mismo billete da acceso a los barcos rápidos que realizan el trayecto entre esta localidad y el puerto de la capital, Rønne, en apenas cuarenta minutos.
Para quien tenga algo más de tiempo, cabe la posibilidad de tomar el barco que, en unas siete horas, realiza el trayecto entre la isla y el puerto de Copenhague. Sin embargo, la alternativa más barata de todas es la del autobús de la compañía Graahundbus que sale desde la zona de la estación central de Copenhague y cuesta algo menos de 200 coronas por un billete simple. Para quien quiera gastarse un poco más, existe la conexión aérea entre la isla y el aeropuerto de Copenhague.
Desde Suecia, la conexión es aún más fácil. De Malmoe salen frecuentemente trenes hacia Ystad, donde se puede enlazar con el barco rápido hacia Rønne.